Marc Prats de Madee: «No creo que lo vayamos a petar»
Hoy en Los de la Música hablamos con Marc Prats, el teclista de Madee. Durante 14 años, el grupo ha estado inmerso en un silencio discográfico, lo que ha hecho que sus seguidores esperen con ansias el lanzamiento de su nuevo disco, Eternity mingled with the sea. Hemos querido conocer más al fondo al grupo, preguntando por sus sensaciones tras el regreso y la situación actual del grupo.
Creo que la primera pregunta es obligada. ¿Qué ha sido de vosotros durante los 14 años de silencio?
Bueno, nosotros hemos seguido haciendo cosas. Como sabéis, nuestro cantante Ramón es el The New Raemon y no ha parado sacando discos. Yo he tocado con ellos, también saqué mi disco en solitario con el bajista y el batería participando. El otro guitarrista también montó su grupo. Parados no hemos estado. En 2014 sacamos un EP de dos temas para decir Ey, estamos aquí. Pero bueno, ha tenido su dificultad el tema de retomar la dinámica de trabajo y, finalmente, lo hemos conseguido. Estamos satisfechos, hacía 3 o 4 años que intentábamos reunirnos para grabar, ensayar,… y era complicado por las circunstancias personales de cada uno.
¿Estas circunstancias personales de las que hablas se ven reflejadas en este disco?
En parte sí. Hemos cambiado el sistema de trabajo, aprovechando la situación de pandemia. Hace un año, cuando nos encerraron en nuestras casas, hablamos entre nosotros. Ya que tenemos tiempo de hacer cosas, por qué no nos mandamos cosas por WeTransfer y vamos viendo qué surge. Esta ha sido la clave del éxito; poder concretar un sistema de trabajo nuevo. En este caso era obligado, no podíamos ensayar ni vernos pero podíamos componer cada uno por nuestro lado.
Habéis regresado con un nuevo disco que ya podemos escuchar pero antes de que se lanzara, pudimos escuchar el adelanto: Hunting Party. ¿Podrías contarnos de qué trata la canción?
Las canciones, a diferencia de nuestros anteriores discos, están escritas por un nuevo miembro del grupo, Mark Swanson. Es un poeta y fotógrafo de Seattle con el cual hemos establecido una amistad. Surgió la posibilidad de trabajar juntos, por lo que se ha incorporado al grupo como letrista. Esto nos da un margen de más autenticidad en las letras, ya que las escribe una persona anglosajona que se dedica a esto. Hunting Party habla del maltrato físico y psicológico hacia una persona y lo que ello conlleva. Las distintas canciones hablan de los sentimientos, la madurez , afrontar dificultades y mirar al mundo para reflexionar lo que está pasando; a nivel social. Ha funcionado bien, él nos manda sus letras y Ramón las adapta con mucha eficacia.
¿Esta situación dificulta el proceso de composición?
Son distintas formas de trabajar. La diferencia es que esta no la habíamos practicado y nos parecía impracticable pero vaya, nos está yendo de puta madre. Tenemos muchas más canciones compuestas de esta forma y estamos preparados para sacar 1 o 2 discos más en los próximos meses.
¿Podemos poner fecha a esos proyectos?
La idea es grabarlas en abril o mayo. Si se puede sacar este mismo año, las sacaremos este año. Tenemos la maquinaria funcionando, esto ya no hay quien lo pare.
¿Entonces tenemos Madee para mucho tiempo?
Yo creo que sí
¿Cómo ha cambiado la industria musical desde que os fuisteis hasta vuestro regreso?
Es evidente que la situación actual para la industria musical es un drama. Para la gente que se dedica a esto las cosas están muy difíciles. Hay gente que gana mucho dinero y sigue facturando, pero a la hora de vender música en formato físico o dar conciertos está muy mal. Aunque yo separaría lo que es la industria musical o lo que es una propuesta musical. Nosotros con esto no ganamos dinero, a veces muy poco y otras lo perdemos incluso. No hemos vinculado nuestro proyecto a un sistema de vida. Podemos hacer lo que queramos, es la parte positiva de no vincular la economía con el proyecto musical. Nosotros hacemos canciones, que es lo que sabemos hacer, las colgamos y si son bien recibidas y se venden mucho pues perfecto, pero si no es así seguiremos haciendo canciones, somos muy tozudos.
En el momento en el que ganéis dinero como para dedicaros a la música enteramente, ¿peligrará vuestra filosofía de no venderse?
Yo creo que esto no pasará. Estamos en una discográfica pequeña de Barcelona, BCore. Llevamos muchos años en esto, el grupo tiene casi 20 años, y seguimos pensando igual. Hacemos canciones, las grabamos, las sacamos y, si funciona y podemos sacar dinero y bolos, perfecto; pero no creo que lo vayamos a petar.
Bueno, nunca se sabe
Bueno, igual sí. Aquello de una canción en un spot publicitario y te forras, ¿no? Pero no es nuestro objetivo, no estamos para ganar dinero y petarlo en estadios. En este sentido somos humildes, vamos como hormiguitas desde hace 20 años y seguiremos haciéndolo así dentro de 20 años.
En otra entrevista decías lo siguiente: Somos un grupo que mola al que quizás no se le ha dado reconocimiento como a otros menos interesantes. ¿Podrías desarrollarnos esto y decirnos si iba por algún grupo en concreto?
No iba por nadie en concreto. Hay otra gente que hace otras apuestas totalmente respetables, pero que yo creo que se alejan del sentido de lo que hacemos. No estamos en una fábrica haciendo churros o tornillos, estamos haciendo música. La música tiene que tener un interés, expresar un sentimiento y llegar al oyente. La industria musical, como empresa que tiene que hacer dinero, a veces se olvida de esto. Es por esto que hay grupos que pasan por ahí y su objetivo es hacer dinero y ser famosos, pero esto no tiene nada que ver con el interés musical de su propuesta.
Lo de nosotros molábamos lo decía porque a veces se habla de nosotros como grupo de culto y la pregunta era qué significa para ti que te llamen así. Y yo decía que se referían a un grupo que tiene interés pero que no ha sido lo suficientemente reconocido o no ha llegado a más público. Yo a eso respondía que mola, en este sentido.
En ocasiones la filosofía que lleváis es un arma de doble filo. Si en un momento dado alcanzáis más fama comenzaría el discurso de Antes molábais más.
Sí, está claro. Como en todo hay muchas críticas y halagos, muchas opiniones distintas y todas respetables. El músico se tiene que defender de todo esto, y estar a lo tuyo: Hacer canciones. Si te clasifican, te ponen en un anuncio,… son cosas secundarias para nosotros.
¿Un grupo que os sea de referencia?
Escuchamos mucha música, somos gente abierta musicalmente hablando. Descubrimos muchos grupos todavía, ya sean coetáneos o clásicos. Te podría decir mil, y seguro que los que escucha otro miembro del grupo yo no los conozco. Yo ahora suelo citar a Muzz, que es el grupo paralelo del cantante de Interpol. Es mi último descubrimiento, hacen cosas muy interesantes.
Para quien os quiera escuchar en directo. ¿Se está gestando la idea de dar conciertos?
La idea es volver a tocar y llevar todas estas canciones al directo. Lo que sí tenemos claro es que no volveremos hasta que haya condiciones para tocar. Las condiciones es poder tocar como antes; en una sala llena de gente, todos pegados, saltando,… Si ahora no es posible, no tocaremos; si es posible en 2022, ahí estaremos. Ganas no nos faltan, pero creemos que no se debe hacer de otra forma. Como no vivimos de esto, podemos permitirnos esperar a poder hacer la gira.
¿Durante estos 14 años qué es lo que más de menos has hecho de Madee?
Estar de gira con la banda. A parte de compañeros de grupo, somos amigos. Ir de gira es agradable, vives experiencias en diferentes ciudades, viajas en la furgo,… Esto es lo que más hemos echado de menos y es lo que nos ha empujado a volver a intentarlo.
Para acabar, ¿qué le dirías a alguien que no os conoce para que os escuche?
No es un grupo de primera escucha. Requiere tranquilidad para que vaya entrando e ir descubriendo todos los detalles y sensibilidad que hay detrás. También le diría que se prepare y venga a vernos en directo, ya que somos un grupo que se crece en directo.